
Claudia Sheinbaum propone Cumbre por el Bienestar Económico ante líderes del G7 en Canadá
Ciudad de México, 17 de Junio de 2025
Prensa en línea
Durante su participación en la sesión plenaria de la 51ª Cumbre de Líderes del G7, celebrada en Kananaskis, Canadá, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, lanzó una propuesta ambiciosa y con visión global: convocar a una Cumbre por el Bienestar Económico, que reúna no solo a las potencias integrantes del G7, sino también a países invitados, naciones de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y otras regiones interesadas en avanzar hacia un modelo de desarrollo justo, cooperativo y sostenible.
Desde el podio de este importante foro internacional, Sheinbaum hizo un llamado a repensar la cooperación global no solo como una estrategia diplomática, sino como un deber ético compartido entre naciones. Enfatizó que el bienestar económico debe convertirse en un derecho universal y no en un privilegio reservado para algunos países. “Todos los pueblos del mundo deben tener la oportunidad de vivir con dignidad. Aunque parezca un ideal, es un objetivo alcanzable si trabajamos juntos”, sostuvo.
La mandataria subrayó que un verdadero compromiso con la paz global debe trascender las palabras y materializarse en acciones concretas de justicia económica, comercio equilibrado y apoyo al desarrollo. “El poder no reside únicamente en lo que se posee, sino en cómo se utiliza. Que esta cumbre no sea solo una reunión de potencias, sino un ejemplo de responsabilidad compartida”, dijo frente a líderes de las economías más influyentes del mundo.
Con un tono firme y humanista, Sheinbaum recordó que su presencia en la cumbre representaba a una nación orgullosa de su historia y de su vocación pacifista. Retomó el legado de Benito Juárez, quien sentenció que “el respeto al derecho ajeno es la paz”, para convocar a las grandes potencias a actuar con responsabilidad histórica ante los desafíos contemporáneos. “México levanta la voz no para confrontar, sino para construir. Nuestro compromiso es con la diplomacia activa, no con el armamentismo”, apuntó.
Durante su intervención, Sheinbaum insistió en que los conceptos de paz y seguridad deben ir acompañados de justicia social, inclusión y respeto a los derechos humanos. “La paz no se reduce a la ausencia de guerra; también significa garantizar condiciones de vida dignas, con oportunidades económicas equitativas y cooperación entre países”, afirmó.
En un mensaje especialmente dirigido a los millones de migrantes que, por necesidad, han buscado nuevas oportunidades fuera de sus países de origen, la presidenta mexicana destacó el valor de estas comunidades para las economías que las acogen. Reconoció con orgullo el aporte de las y los mexicanos que radican en Estados Unidos, a quienes describió como trabajadores ejemplares que cumplen con la ley y contribuyen de manera decisiva al bienestar de ese país. “Ellos merecen reconocimiento, no discriminación”, aseveró.
La propuesta de Claudia Sheinbaum se dio en el marco de un encuentro internacional que reunió a representantes de Canadá, Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia, Reino Unido, Japón, India, Corea del Sur, Australia, Brasil, Sudáfrica y México, así como a organismos multilaterales como la ONU, el Consejo Europeo, el Banco Mundial y la Comisión Europea.
Con esta intervención, la presidenta mexicana marcó un posicionamiento firme en favor de una nueva arquitectura internacional basada en la equidad, la solidaridad y el respeto mutuo, y dejó claro que México apuesta por un futuro donde el bienestar sea el eje articulador de la cooperación global.